Hace unos días me quedé sin crema de noche, y aproveché la oportunidad para probar un producto natural del que se habla muchísimo: el aloe (o sábila). Lo hice yo misma, directamente de la planta y me quedé fascinada con los resultados. Lo estoy utilizando en las noches y es sencillo, económico y de un efecto espectacular.
¿Por qué usar aloe (sábila)?
Entre las propiedades de esta planta está el ser limpiadora, astringente, hidratante, regeneradora (por lo tanto se considera rejuvenecedora) y antibacteriana. De manera especial, está indicada para las mujeres de los felices sin cuenta, en casos de pieles muy secas, maltratada por el sol, madura o con apariencia de cansada, pues regenera los tejidos dañados, estimulando y fortaleciendo las fibras de colágeno y elastina, reduciendo el proceso de envejecimiento de la piel, a la vez que reduce las arrugas y evitar la aparición de nuevas.