Rara vez la gente habla sobre la evacuación intestinal (ir al baño, evacuar, defecar, hacer la popó o como quiera que tú lo llames) pues se habla de heces (caca, materia fecal, deposiciones o el eufemismo que más te guste o se acostumbre en tu ciudad) y eso lo convierte en un tema que para muchos es “sucio” y “huele mal”, sin embargo la verdad es que tiene mucha relación con nuestra salud.
Aunque hay una resistencia oficial a admitir la relación entre estreñimiento y cáncer de colon, hay quienes creen que contener en el intestino cargas de materia descompuesta por varios días, y hacerlo repetidamente por muchos años, podría ser un factor que desencadene la aparición de cáncer.
Ya que las mujeres de sin cuenta por el tema de edad tenemos ya un factor en contra, debemos estar muy conscientes de nuestra responsabilidad para no tener ninguno otro más ¿cierto? Pongamos manos a la obra, informémonos y aseguremos muchos años de buena salud.
Algunos números
- ¿Sabías que tal vez en este momento tienes entre 1 ½ a 6 ½ kilos de materia fecal en el colon?
- ¿Sabías que la materia fecal contenida en el colon, de no ser expulsada en el tiempo debido, es un elemento tóxico?
- ¿Sabías que la falta de deseo de evacuar de las personas con estreñimiento puede deberse, entre otros factores, a malos hábitos alimenticios, falta de ejercicio o estrés?
- ¿Sabías que el cáncer de colon es la segunda causa de muerte por cáncer, después del cáncer de pulmón en el hombre y de el de mama, en la mujer?
- ¿Sabías que entre un 22% y un 36% de los casos, se diagnostica con la enfermedad avanzada y, en estos casos, el índice de supervivencia es casi nula y que sólo son detectados un 37% de estos cánceres en un estadio temprano?
- ¿Sabías que el cáncer de colon ha ido aumentando su frecuencia en los países desarrollados?
- ¿Sabías que afecta a 3 mujeres por cada varón?
Estas cifras son tremendamente alarmantes y nos muestran una situación que debemos conocer más de cerca, para prevenir en tanto podamos, que nos pueda afectar.
¿Sufres de estreñimiento?
El estreñimiento es uno de los trastornos digestivos crónicos más frecuente, en su nivel menos agudo afecta al 5% de la población, mientras que un 30%-50% sufre de la condición de dificultad para evacuar o evacuaciones muy lejanas entre sí; cuando se padece esta condición por muchos años se considera estreñimiento crónico. Aunque muchos médicos no le dan la difusión debida, dedicándose a “salvar” pacientes por causas más evidentes de riesgo de su salud, el estreñimiento tiene el potencial de ser una causa de muerte, por su incidencia en la salud del colon.
La condición de estreñimiento varía de una persona a otra, para algunos indica dificultad en la evacuación de las heces, o una heces demasiado duras, para otros significa evacuación muy poco frecuente. Generalmente los médicos diagnostican estreñimiento cuando una persona realiza menos de tres deposiciones por semana o cuando se requiere un esfuerzo excesivo para la defecación.
El final de la digestión o el inicio de una enfermedad
Sumemos:
1. Hacemos poca actividad física
2. Consumimos mucha grasa, azúcar, carbohidratos y alimentos industrializados.
3. Consumimos poca fibra regularmente.
4. Consumimos poca agua.
5. Realizamos pocas evacuaciones de nuestros desechos.
El resultado:
Los desechos que debe procesar nuestro cuerpo son altamente tóxicos y se concentran en el intestino, por nuestra poca frecuencia de evacuación. Es lo que muchos especialistas llaman “Autointoxicación”.
Cuando la materia fecal está en el cuerpo por varios días, se va descomponiendo gradualmente, el colon se vuelve lento y genera un nivel de toxicidad que regresa al cuerpo por la sangre, envenenando a nuestro organismo. Aunque la mayoría de médicos no respalda esta información (estas contradicciones son muy frecuentes en el gran negocio de la medicina y la industria farmacéutica, ¿no es así?), un colon expuesto a estreñimiento crónico por varios años puede afectar el metabolismo del hígado y de los riñones, provocar dolores de cabeza y hasta problemas de memoria. Algunos problemas de la piel y hasta problemas menstruales podrían ser también una señal de auto-intoxicación.
En mi experiencia, habiendo sufrido estreñimiento crónico hasta la adultez (tener una evacuación semanal era algo maravilloso), puedo testimoniar que sufrí cólicos tremendos siempre que mi período venía cuando estaba “congestionada” (por decirlo de alguna manera). Si lograba estar con el intestino limpio en esos días, los dolores eran mínimos. Luego que controlé mi alimentación y corregí mi estreñimiento, los cólicos desaparecieron.
Aprendiendo algo sobre Cáncer de Colon
El colon es la primera sección de intestino grueso (la otra es el recto), donde se termina de absorber nutrientes y agua de los alimentos, a la vez que se aglutina el material de desecho que luego se elimina a través del recto y el ano. Como todo cáncer, el de colon nace con el crecimiento descontrolado de células anormales, en este caso en la parte final del intestino. Si esas células pueden llegar a invadir y destruir el tejido cercano o penetrar el torrente sanguíneo o linfático, pueden pasar a otras zonas del organismo y extender el cuadro. Según su inicio puede ser cáncer de colon o cáncer de recto, sin embargo uno y otro presentan distintos síntomas y requieren diferentes pruebas para realizar un diagnóstico.
Lo “bueno” en estos casos, es que no es un cáncer de evolución rápida y agresiva, (antes de que se desarrolle un cáncer suelen aparecer lesiones en el intestino que se denominan displasias o pólipos adenomatosos), y proporciona tiempo para tratarlo, sin embargo, muchas veces ignoramos los síntomas y seguimos agrediendo a un órgano que normalmente no nos preocupa demasiado, hasta que la situación es irreversible. Algunos tipos de pólipos no son cancerosos, pero el hecho de haber tenido aumenta la probabilidad de tener, en un futuro, cáncer en esa zona del intestino.
Sin embargo es importante saber que el cáncer de colon es el segundo tumor más frecuente en occidente, y el de mayor tasa de mortalidad, siendo, a la vez, uno de los más tratables si se detecta a tiempo (90% de los casos logran la cura).
Factores de riesgo del Cáncer de Colon
• Edad: este tipo de cáncer suele ser más frecuente entre aquellas personas que rondan los cincuenta años o más (aunque puede darse en personas jóvenes).
• Predisposición genética: historial personal o familiar de pólipos o de cáncer de colon (alrededor del 10% de los casos de cáncer colo-rectal se deben a mutaciones genéticas hereditarias).
• Enfermedades inflamatorias intestinales previas (enfermos con colitis ulcerosa con una evolución de 7-10 años presentan un riesgo aumentado de cáncer colo-rectal; pacientes con enfermedad de Crohn tienen un riesgo 20 veces mayor de generar un cáncer colo-rectal).
• Historia personal de cáncer: cáncer de útero, ovario o mama, aumentan las posibilidades de sufrir cáncer de colon.
• Hábito de vida sedentaria: llevar una vida sedentaria está comprobado que favorece la aparición del cáncer.
• Dieta: poca fibra, frutas y verduras y demasiadas grasas y azúcar.
• Consumo de tabaco: los hombres que fuman tienen un 34% más posibilidades de padecerlo, y las mujeres fumadoras un 43%.
Ya que no podemos reducir nuestra edad, sí podemos disminuir o variar otros factores de riesgo, como:
• Realizar ejercicio físico regularmente.
• Tomar una dieta baja en grasas, azúcar y carbohidratos y en cambio rica en verduras, cereales y frutas.
• Dejar de fumar.
• Beber alcohol sólo ocasional y moderadamente.
• Tener un funcionamiento intestinal frecuente y saludable
Diagnóstico precoz del cáncer de colon
Si tienes más de dos factores de riesgo, puedes pedir un diagnóstico precoz con el test de sangre oculta en heces (TSOH). Si el resultado de la prueba es positivo se completa el estudio con una colonoscopia, para visualizar el origen del sangrado. Otra prueba es la realización de una colonoscopia completa. Por lo molesto del examen se recomienda en grupos de riesgo.
¿Cuáles son las causas más frecuentes de estreñimiento primario (el que no es debido a otra enfermedad)?
La mayoría de pacientes con estreñimiento crónico sin causa aclarada (estreñimiento primario) presentan alguna anomalía en el funcionamiento del colon, el recto o el ano, que son:
1. Disminución de los movimientos del colon (personas cuya dieta es muy pobre en fibra, especialmente)
2. Ausencia de relajación anal o escasa sensibilidad del recto (algunas personas tiene problemas para relajarse al defecar y por eso “cierran” el ano en lugar de permitir que fluya el contenido hacia el exterior, mientras que otros no notan que las heces han llegado al recto por haber ignorado este deseo durante muchos años, por no ir al retrete con frecuencia. En una cantidad muy pequeña de casos se presenta la disminución de la sensibilidad por lesiones en los nervios encargados de transmitir las sensaciones hacia el cerebro).
3. Falta de fuerza abdominal para empujar las heces.
La escala de Bristol
Para poder entenderse en un tema tan subjetivo, existe la Escala de Heces de Bristol, que es un sencillo gráfico de uso en medicina para clasificar la forma de las heces humanas en siete grupos.
- Los tipos 1 y 2 indican estreñimiento.
- Los tipos 3 y 4 son heces ideales, especialmente el 4, ya que son los más fáciles de defecar.
- Los tipos 5, 6 y 7 tienden hacia la diarrea.
¿Cómo podemos luchar contra el estreñimiento?
1. Lo primero es NO USAR LAXANTES, pues no corrigen un funcionamiento incorrecto, sino que alteran el normal funcionamiento del cuerpo. Su uso debe ser sólo extraordinario. El abuso de los laxantes puede originar graves problemas en el caso de una dosis muy elevada; que puede ocasionar parálisis intestinal, síndrome irritable de intestinos, pancreatitis, entre otros.
2. Lo más efectivo es tener una dieta rica en fibra consumiendo verduras, cereales, frutas y frutas secas. De modo especial se recomienda consumir Lechuga, zanahoria crudas, espárragos, nabos, brócoli, alcachofas, lentejas, frijoles negros, garbanzos, semillas de girasol, almendras, pistachos, guindones, nueces, manzanas, mandarinas, ciruelas e higos, avena, arroz integral, salvado de trigo, entre otros.
3. Ingerir 2 litros diarios de agua facilita la hidratación de las heces contribuyendo a su expulsión.
4. Fomentar el hábito de evacuar, aún cuando no exista un deseo espontáneo, pues el estrés y la falta de costumbre puede haber invalidado el deseo de defecar. Para ello debe darse un espacio y tiempo sin apuros y sin estrés (una lectura agradable puede ser de ayuda), así como estar dispuesto a responder a la llamada del intestino.
5. Hacer ejercicio regularmente. El ejercicio ayuda a la digestión y a que el cuerpo expulse los desperdicios. Cuando no haces ejercicio, la digestión se vuelve más lenta y causa estreñimiento.
6. En algunos casos extremos puede ser necesaria la reeducación esfinteriana (llamada en inglés "biofeedback"), una técnica de aprendizaje que se utiliza con éxito en el tratamiento del estreñimiento, para mejorar la capacidad de vaciar el recto a voluntad, enseñando al paciente a reconocer la distensión rectal (sensación de deseo defecatorio), a realizar una compresión abdominal adecuada (aumento de la contracción rectal) y a relajar eficazmente el esfínter anal (favoreciendo la expulsión de las heces). Se requiere de la orientación de un profesional.
¿Y la postura?
Existen infinidad de recomendaciones muy particulares sobre la postura que adoptamos al evacuar, y todas muy interesantes, pero buscando encontré un producto en el mercado que permite elevar la altura de las rodillas respecto a las caderas, y con ello aduce contribuir a facilitar la evacuación, pues indica que tener los pies más altos se acerca a una postura en cuclillas, que facilita la estimulación.
Aunque no lo he probado, creo que eso tiene sentido, pues se aproxima a la postura que antiguamente se tenía para defecar (cuando no existían los sanitarios!!) por lo tanto es posible que sea más adecuada al mecanismo natural del cuerpo. No me corresponde hacerle publicidad al artefacto, pero, en cualquier caso, tomar un taburete e intentarlo no cuesta nada.
Si buscas mayor información te dejo un video del Dr. Joel Robbins (es de hace varios años pero es muy bueno y está subtitulado en español, su sitio web http://drjoelrobbins.com/ es en inglés), donde hallarás información interesante muy detallada.
Finalmente... ¡Ya lo sabes!:
- Cuida lo que comes y bebes
- Cuida lo que haces y lo que no haces
- Y ve al baño hasta que lo logres!!!
ResponderEliminarHola, muy buena publicación. Yo tengo una duda sobre la manzana, siempre he leído que es buena combatir el estreñimiento, pero a mi me aumenta la dolencia, esto dependerá de la persona, ¿cierto?. Un saludo.
Hola. Vamos por partes. Primero, está demostrado que la manzana es un buen regulador intestinal, si la comes cruda y con su cáscara, especialmente en ayunas o al caer la tarde. Ayuda en la lucha contra el estreñimiento porque tiene mucha fibra que estimula la actividad intestinal. No es imposible que en algunos organismo cause el efecto contrario, de hecho estadísticamente ocurre, pero es poco probable.
EliminarAhora es importante ver cómo está el resto de tu dieta diaria. Si consumes alimentos que estriñen y poca agua, es difícil que solo una manzana arregle eso. Hay que hacer un poco todo: alimentos que faciliten el movimiento intestinal, adecuado consumo de agua, ejercicio y dedicación de tiempo exclusivo para "sentarse" y hacerlo con tranquilidad (yo me llevo el smartphone y ahí reviso mi correo, etc.).
Ojo: si pelas la manzana estás reduciendo bastante su contenido de fibra.
Coméntanos cómo te va.